Radio universitaria: también un sonido para ver

Radio universitaria: también un sonido para ver

1 junio, 2016 Crónicas 0
Delegados en Birán.

Delegados en Birán.

Por: Osleydis Pérez Ferriel

Todo atentaba contra ellos: el tiempo, el transporte, los recursos, ¡la convocatoria!, pero algo mucho más fuerte los impulsaba…Para prepararse fueron mañanas y tardes intensas…para algunos, incluso noches. Cualquier cosa valdría la pena con tal de lograr llegar, ¿a dónde?, al X Festival Nacional de Radio Universitaria, celebrado en Holguín del 26 al 29 de mayo pasados.

Cinco participantes de la Universidad de Camagüey “Ignacio Agramonte Loynaz” partieron rumbo a la ciudad de los parques. La sede “Celia Sánchez Manduley” de la Universidad de Holguín (UHO), los esperaba con la promesa de vivir cuatro días de radio, intercambio y aprendizaje. Fueron cinco los delegados agramontinos, pero representaban la labor de aquellos que aman el mundo radiofónico.

Géneros periodísticos como documentales, crónicas y comentarios y una serie de programas de corte musical, histórico o educativo conformaron la producción que concursaría. También las menciones y promociones radiales tuvieron un lugar dentro del paquete informativo camagüeyano, evidencia del poder de creación y síntesis que se logra en estos espacios.

El viaje, rápido; el clima, perfecto, excepto cuando la lluvia amenazó con convertir a la provincia en otra bahía; las delegaciones, hermanas, juntas siempre, compartiendo siempre, ayudándose siempre. Este no era un festival, no era una competencia, era más: eran amigos que se reunían para intercambiar experiencias, maneras de hacer. Eran compañeros que se juntaban para reconocer el buen trabajo e impulsar mayores y mejores productos generados desde la radio universitaria.

Paseos hubo varios. El sitio histórico Birán, hogar de nuestros máximos líderes, Fidel y Raúl Castro, cautivó la atención y encantó a los delegados que, de cerca comprendieron el temprano sentido justiciero que crecía en la familia Castro Ruz. El Chorro de Maíta y la Aldea Taína, lugares que dieron voz a la historia de nuestros antepasados, los primeros pobladores de Cuba, despertaron, más que la curiosidad, el asombro de muchos al verse cara a cara con el ayer. El polo turístico Guardalavaca, joya de las playas cubanas, refrescó a una entusiasta juventud radioaficionada que quedó prendada para siempre de las maravillas holguineras.

De esa provincia muchos elementos llamaron la atención: su limpieza, su organización, su escasez de coches de caballos y prominencia de guaguas, su afición al arte, con plazas y parques convertidos en pequeñas exposiciones al aire libre y su hospitalidad.

La calidad de los trabajos evidenció el altísimo nivel de la radio universitaria, donde destacó, por ejemplo, el impresionante y sistemático trabajo realizado por las estaciones de radio de la Universidad de Oriente que participaron en el Festival, la excelencia periodística de los muchachos holguineros, el frescor de los camagüeyanos, la multiplicidad de los de Pinar del Río y la UCI, el ingenio de los villaclareños y la sutileza de la Universidad de Moa.

A pesar de vivir una competencia donde se sabía prácticamente el resultado y el poderío de la Universidad de Oriente, por su merecidísima labor, los de casa no pasaron desapercibidos: Lorena Chávez, de 3ro, obtuvo premio por su mención de salud, con una innovadora forma cantada de llevar el mensaje; Lisandra Morales, de 4to, obtuvo mención por su radiodocumental “Una joya en el éter”, dedicado al locutor avileño Alberto Pardo; y Cristian Rojas, de 1ro, ganó otra de las menciones por su musical de todos los lunes, Juventud.cu.

El trabajo de estos estudiantes de Periodismo ganó el favor del jurado, pero la voz de Irailis Manso, de 1er año en la Licenciatura en Turismo, en la UC, cautivó unánimemente, por lo que se le otorgó el Premio en Voz Femenina.

Hecha la clausura, dados los contactos y finalizado el Festival, era tiempo de partir. Quedaron planes para el reencuentro, técnicas ideadas para mejorar los programas presentados, experiencias insólitas…quedó aire de Festival, que seguramente renovará la visión con la que se suele mirar la radio universitaria en todo el país.

La cita queda hecha. Dos años faltan pero sobra expectativa. Hay radio universitaria para todos.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *