Más que gimnastas
Con la música de cómplice, estudiantes de diversas universidades del país, probaron su versatilidad como atletas, demostrando sus potencialidades para danzar, divertirse, competir y mantenerse en forma, al practicar una compleja disciplina que mucho requiere de técnica y arte: la gimnasia musical aeróbica.
Aunque sus actuaciones no se acercan a las de atletas profesionales, algunas se distinguieron por su nivel artístico, ejecución y coordinación, resaltando entre ellas la de Aylén Fernández Anzando de la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte de La Habana, que la hizo merecedora del oro entre las solistas femeninas.
A nivel general, sobresalió el equipo del Instituto Superior Minero Metalúrgico de Moa (ISMM), cuyos integrantes se llevaron los lauros en las competencias de dúos, tríos y quintetos, los que a pesar de no desarrollar rutinas complejas sí lograron cautivar a la audiencia y mostrar una buena sincronización y fluidez.
Entre los solistas masculinos, Dayron Martínez Tellez, de la Universidad de La Habana alcanzó los mayores puntajes, seguido por Yander Begue, del ISMM, y Enrique Venzant, de la casa de altos estudios de Santiago de Cuba; mientras que entre las féminas sobresalieron también por su desempeño individual, Yershi Justo, de la CUJAE y Arianna de Arma del ISMM.
Los 11 jueces calificaron teniendo en cuenta el desempeño artístico, la ejecución y el grado de dificultad, consecuentes con las características de estos estudiantes-atletas, los que debían demostrar movimientos continuos, flexibilidad, fuerza, potencia, agilidad, coordinación, ritmo, sentido musical y expresión, con utilización de los movimientos característicos de la disciplina (combinaciones coreográficas de brazos y piernas).
Aunque se impone, de manera general, un entrenamiento más riguroso, especialmente para evitar lesiones y mejorar el desempeño, la gimnasia musical es sin duda, una competencia que gusta mucho por su belleza, y que en esta XIII Universidad Nacional llegó para demostrar su valía y potencial entre los futuros profesionales del país.
Por: Adary Rodríguez Pérez
Fotos: Elio Miranda